Tus pequeños también pueden divertirse estudiando inglés en la CET.
Estudiar un idioma a temprana edad tiene varios beneficios:
Mayor facilidad de aprendizaje: cuanto más pequeño sea el niño cuando comience a estudiar inglés, más sencillo será y más beneficios le aportará.
Salud mental: aprender inglés desde edades tempranas desarrollarán su cerebro de forma que tendrán una mayor capacidad de concentración, mayor agilidad y capacidad de resolución de problemas, mejora la atención y memoria.
Culturalmente positivo: el niño tendrá acceso a dos culturas distintas. Por lo que se enriquecerá su educación y desarrollo intelectual y tendrá una mente más abierta hacia el mundo y en lo que respecta a su relación con los demás.
Pérdida a ser tímidos: los niños cuando son muy pequeños no tienen vergüenza de nada, por lo que se lanzan a hablar y a practicar inglés sin miedo a equivocarse o a lo que piensen los demás, adquiriendo confianza y seguridad en sí mismos de cara al futuro.